EN LAS NUBES

ME HAN DICHO QUE AHORA ERES UN ANGEL.
Empiezo a creerlo: ya apuntabas maneras desde pequeñito. Parecías estar siempre en las nubes, ausente, en tu mundo;ajeno a nuestras conversaciones en casa luego nos decías "es que no me contáis nada". Después creciste y creciste,tan alto, más cercano al cielo, y te quedabas como "empanao", con una mirada profunda, perdida en la lejanía.
Como en esta foto que me sorprendió al descubrirla camuflada en medio de una serie de numerosas fotos de bichitos, caquitas y plantitas en la tierra, de tus investigaciones por Cazorla; como si de repente necesitaras elevarte de la tierra y visitar tus nubes.
Y luego esa intimidad con tus amigos alados. Recuerdo cómo distringuías los cernícalos machos de las hembras cuando volaban a gran altura aquel día que te acompañé por Villena.
Acabo de leer una frase de Gustav Flauber :"Creo que si miras al cielo acabarás por tener alas".
Ahora nosotros miramos ese cielo desde la Kalita, junto al arbolito, buscándote en esos atardeceres mágicos.
ME DICEN QUE AHORA CUIDAS DE NOSOTROS y de otros seres, y nos guias para que seamos felices.
Lo has estado haciendo siempre. Quién estando a tu lado no ha sentido tu presencia tranquila, silenciosa y protectora; junto a ti simpre había paz.
Hoy me has guiado a escribirte esto con un guiño de esos que llaman casualidad (empiezo a dudar de ellas), cuando ayer cayó de repente al suelo de tu habitación una lagartija de cerámica que tenías pegada en una caja de CDs; me pareció extaño; intenté averiguar porque y de donde había caido, saqué dos CDs y lo que veo es en una caja vacía un angelito de Navidad pegado con celo (el otro era Bob Marley, Don`t Worry, Be happy).Llevaba días queriendo escribir en el bolgg lo que me cuentan de tu "angelitud", porque necesito hablarte y que me hablen de ti y con esto me has dado ese empujoncito.
DICEN, TAMBIÉN,QUE ESTAS EN EL CIELO, o en otro plano, o en otra dimensión, o en el bardo....Yo me quedo con lo que me decían de pequeña y prefiero que estés guardando una de las esquinitas de mi cama, y de las camas de todos los que te echan de menos, para que por las noches, de vez en cuando te cueles en nuestros sueños y podamos darte el abrazo que tanto necesitamos.
TE QUIERO, MI ANGELOTE.